El propio fotógrafo ha contado para el diario Leicester Mercury que, ambos se fueron a la cama pronto y a las 3.30 am, su mujer Holly Dawson le despertó para decirle que el bebé estaba llegando. "Me levanté deprisa y solo había realizado un par de llamadas antes- al hospital, a mi madre y a la madre de Holly- cuando medimos las contracciones y eran cada 15 segundos" explica el padre primerizo.
Sólamente Martin y su madre, que estaba al teléfono con la comadrona, fueron los asistentes del parto. En menos de una hora, la cabeza de su hija había salido y no habían recibido ningún apoyo sanitario, así que fue el propio Martin quien sacó a la pequeña Isabelle, no sin antes preparar la cámara para grabar el momento. Poco después, la comadrona llegó a la casa y comprobó que tanto la madre como el bebé se encontraban bien.