Después de los embarazos, el cuerpo de las mujeres suele cambiar. Esto fue lo que le sucedió a Lisa Wilson, una joven de 28 años, tras dar a luz a sus dos hijas. Tal y como recoge The Sun, Lisa echaba de menos el cuerpo que tenía antes de quedarse embarazada, pero todo cambió cuando sus hijas le preguntaron por sus estrías y su tripa caída.
Tras esto, la madre hizo todo lo posible por aceptar su cuerpo tal y como es ahora mismo. “Me senté y me pregunté por qué me siento avergonzada por mis estrías. Creo que la razón por la que la mayoría de nosotros nos avergonzamos es porque la sociedad nos considera indeseables y poco atractivos. Se supone que debemos escondernos después de tener bebés, ya que nuestro cuerpo es menos sexy que antes”, declaró la joven a The Sun.
Ahora, Lisa reivindica la aceptación del cuerpo propio a través de su cuenta de Instagram en la que publica imágenes de su nuevo físico tras el parto y los usuarios no paran de realizar comentarios positivos y de mujeres que encuentran en ella una gran inspiración.
“Siéntate y haz un funeral con tu cuerpo pre-bebé. Yo miraba fotos antiguas mías todo el tiempo y deseaba tener ese cuerpo, mi ombligo era perfecto. Tuve que sentarme y aceptar que ese ya no es mi cuerpo. No puedo pasar la vida mirando ese cuerpo y deseando que vuelva a ser así. Debemos mostrarlo con orgullo. Estoy orgullosa de mis hijas, así que empecé a utilizar bikinis y a no importarme tanto. Fue muy liberador para mí. Yo estaba como… ¡Sí, tengo hijos y no me avergüenzo de mi cuerpo! Esto tenía que suceder para tenerlos aquí”, explica Lisa a The Sun.
También insistió en que le parece raro que las mujeres se sientan avergonzadas de las “rayas de tigre” cuando éstas fueron creadas por “niños a quienes amamos”: “Para nuestra futura generación de niñas, sus imperfecciones son algo que se debe celebrar, porque las hace únicas”, reivindica en su Instagram.