“Mi esposa (Donna Lowe) fue diagnosticada con cáncer cervical tres días antes de Navidad”, explica en su cuenta de Facebook. Días más tarde, les informaron de que “el cáncer ya se había extendido a sus ganglios linfáticos en el área pélvica”.
La mujer fue tratada con radioterapia diaria durante seis semanas y con una sesión de quimioterapia, que tuvo que ser interrumpida por varias complicaciones. Finalmente, y pese a su dura lucha, Donna Lowe falleció el 5 de agosto de 2017 a los 32 años rodeada de sus cuatro hijos, su madre y sus hermanos.
Su marido ha decidido compartir su historia un año después del diagnóstico para animar a todas las mujeres a hacerse la citología. Su mujer, cuenta, la pospuso por “razones que ni siquiera puedo recordar”.
“Mi mujer canceló su prueba y pagó el precio con su vida. No dejemos que otras familias pasen por el inmenso dolor con el que nos enfrentamos diariamente”, ha escrito. A sabiendas de la dureza de las imágenes, Lowe se ha disculpado, pero ha hablado de la necesidad de “demostrar lo devastador que es el cáncer” y ha pedido “salvar vidas” a través de la prevención.