El Cabildo de El Hierro ha confirmado que se han producido dos erupciones submarinas al sur de La Restinga detectadas por una embarcación de Salvamento Marítimo. Este jueves llega a la isla el primer buque oceanográfico a la isla para estudiar el fenómeno Por su parte, el Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha registrado este miércoles cinco sismos de baja intensidad, siendo el de mayor magnitud de 2,4 grados en la escala de Richter, y después de que el martes se elevase a rojo el semáforo de riesgo volcánico en la zona de La Restinga.
En concreto, y según informa el Cabildo de El Hierro en su Twitter, se han detectado dos manchas en el mar con un fuerte olor a azufre y peces muertos, primeros signos directos de erupción magmática.
Se trata de un punto a dos millas y 750 metros de profundidad y otro a 1,5 millas y 500 metros al sureste de La Restinga. Las manchas se detectaron cuando la embarcación se encontraba recogiendo muestras para los científicos.
Este juves está prevista la llegada del primer buque oceanográfico a la isla para estudiar el fenómeno. Los vulcanólogos que se encuentran en la isla advierten de la posibilidad de una erupción tierra adentro.
Esta teoría está apoyada por la evolución de los terremotos que tienen lugar en la isla. Los de las últimas horas ya tienen epicentro en el interior de la isla, donde hay 500 cráteres a cielo abierto.
Cinco sismos en un sólo día
El movimiento de 2,4 grados se detectó a las 03.33 horas a unos 18 kilómetros de profundidad. El último registrado se inscribió a las 08.06 horas y alcanzó los 2,2 grados. Ambos en el municipio de El Pinar. El último sismo sentido por la población se registró a las 16.45 horas de este martes y sumó 2,7 grados de magnitud en la escala de Richter.
El Comité de Dirección del Plan Específico de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico (Pevolca) decidió la evacuación de La Restinga -una población de unos 500 habitantes- y finalmente fueron 48 las personas reubicadas en la Residencia de Estudiantes de Valverde, en su mayoría, turistas, según ha informado el Cabildo insular. El resto se trasladó a otras viviendas.