Fue Tyler Hobbs, la pareja de 21 años de la mujer, quien llamó a la policía para dar a conocer el terrible suceso. Al parecer, según WTFS, el hombre indicó que el hijo de su novia se había caído por las escaleras y que falleció después de intentar realizarle la reanimación cardiopulmonar sin éxito. Además, aseguró que había “sucedido hace unos días” y que se encontraba asustado sin saber qué hacer.
Por ello, la policía se acercó al domicilio que compartía Hobbs con María Girón-Molina, la madre del pequeño, y encontraron algo horrible en el dormitorio de la pareja: el cuerpo en descomposición del niño en el interior de un recipiente de plástico. El táper estaba en el interior de un armario, recubierto por mantas.
En ese momento fue cuando Hobbs comenzó a relatar lo que realmente había sucedido. Y es que según explicó, el bebé no paraba de llorar, lo que le causaba “dolor de cabeza”. Posteriormente, el pequeño golpeó un marco y una lámpara que estaba en la mesita de noche, por lo que el hombre asegura que se enfureció tanto que cubrió la boca del niño con su mano para “amortiguar” el llanto, tal y como explica KFSM.
Y fue así, como falleció el pequeño, ya que Hobbs reconoció que tras taparle la boca y sacudirlo, el bebé dejó de respirar. También reconoció que durante el momento de los hechos estaba bajo la influencia de la marihuana, que había “enloquecido” y que fue después cuando metió el cuerpo en el táper.
A pesar de todo, la policía ha indicado que el hombre expresó remordimiento por sus acciones y que no tenía intención de lastimar al hijo de su pareja, según relata Oxygen. Mientras, la madre del bebé comentó que vio sangre en sus sábanas y las puso en el armario. NY Post asegura que no quiso avisar a la policía de lo sucedido porque no quería perder la custodia de sus otros hijos.
Finalmente, mientras Hobbs ha sido arrestado por asesinato en primer grado y abuso de un cadáver, Giron-Molina ha sido detenida por abuso de un cadáver. Ambos tendrán que comparecer ante un tribunal en diciembre.