Una corredora de Seattle puso en práctica lo aprendido en una clase de defensa personal cuando fue atacada sexualmente por un vagabundo en un baño público, según informa 'Daily News'.
Kerry Herron fue atacada por Gary Steiner mientras se entrenaba para una maratón. El hombre la esperó para después golpearla en la cara e intentar violarla. En medio de la agresión, Kerry recordó lo aprendido en una clase de defensa personas que había tomado tres semanas antes
"No podía ser violada por ese tipo", ha declarado. "Aprendí a clavar los huesos duros en zonas blandas de su cuerpo". En un punto del ataque, fue capaz de escapar y, con la ayuda de un transeúnte, encerró al agresor en el baño hasta que llegó la ayuda.
Cuando la policía acudió al lugar, hizo saber a Kerry que había hecho un "impresionante trabajo". Después, la chica compartió las imágenes de sus heridas en las redes sociales. "Mi cuerpo está herido, pero mi espíritu está intacto", ha manifestado.