Según ha informado Daily News, la ciudad de Seal Beach, en California, celebró este martes una reunión especial entre seguidores y detractores del cerdo Bubba, un animal que ha vivido durante 4 años en la ciudad, en casa de su dueña, Madonna Grimsley, pero cuyos vecinos comenzaron a quejarse acerca de los ruidos y el olor del animal.
En la reunión, Grimsley solicitó poder quedarse con su mascota, mientras que su vecino Nat Ferguson dio sus argumentos para que el animal no continuase viviendo en el vecindario. Madonna aseguró que Bubba la ayuda a mantenerse positiva frente a su enfermedad.
Tras la reunión, se ha decretado que todos los cerdos tienen prohibido vivir como mascotas entre todos los miembros de la comunidad, sin embargo, con Bubba se ha hecho una excepción y podrá quedarse con su dueña, ya que después de 4 años en Seal Beach, han permitido que continúe viviendo en la ciudad.