Todo ello, a pesar de que hayan mantenido hasta este momento su inocencia, según Caballero, porque llegados a este punto "se encuentran en una encrucijada en la que tienen que tomar decisiones que no son fáciles".
Caballero ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación antes de acceder a la vista, que se reanuda tras ser suspendida el pasado jueves por la indisposición de otro de los letrados, Melecio Castaño.
"Ellos no dejan de saber el riesgo al que se enfrentan aquí, por todas las circunstancias que dijimos el otro día, y ellos saben que por muchas alegaciones que se puedan hacer exculpatorias, si finalmente se terminara asumiendo por el tribunal del Jurado la versión de la acusación se estarían enfrentando a la pena más grave que permite el Código Penal", ha explicado Caballero.
Por tanto, Caballero considera "muy digno" que uno mantenga su inocencia "hasta el final". De hecho, en su experiencia profesional recuerda que mucha gente ha ido a su despacho diciendo que van a defender las cosas "como fueron porque la verdad solo tiene un camino", pero "se han tirado muchos años dándole vueltas al patio de la cárcel pensando que, a lo mejor, la verdad no tiene nada más que ese camino".
Por esa razón, le parece "legítimo" plantearse otras muchas opciones y alcanzar una conformidad con el fin de evitar "los 40 años de cárcel". Con esta opción, Caballero reconoce que "todo el mundo va a decir que hay un reconocimiento explícito de culpabilidad", ha reconocido Caballero, pero ha emplazado a la gente a valorarlo "cada uno como quiera".
Caballero visitó a su defendido el viernes y le dijo que, en última instancia, era él quien tiene que tomar esa decisión. En cualquier caso, ha confirmado que Cuenca "no tiene una decisión meditada y tomada de forma definitiva" porque "la cabeza da muchas vueltas entre 25 años, 40 años o nada".
Cuenca piensa que, a lo sumo, él tenía que tener responsabilidad, si acaso, "por encubrimiento", pero eso "sería en la mejor de las hipótesis". Y es que ha reconocido que, desde el primer momento, "se han planteado las cosas de la forma más cruda, morbosa y macabra posible".
"Eso lo saben ellos y, precisamente por la posibilidad de irnos al peor de los escenarios, es por lo que se están planteando otras posibilidades", ha concluido.