A pesar de que no existía parecido físico entre Valentina Naidenko, de 66 años, y Ekaterina Naidenko, de 28, ambas siempre pensaron que eran madre e hija.
"Era una niña rellenita, no delgada como los otros, pero me alegraba que estuviera sana. No sospechaba nada, pero otras personas sí", confiesa Valentina, que se puso en contacto con el programa de televisión ruso ADN del canal NTV, para despejar todas sus dudas.
Los resultados fueron sorprendentes para todos. Las dudas se confirmaron. El profesor de medicina forense y presentador del programa, Viktor Kalgutin, reveló ante la audiencia rusa que las pruebas de ADN mostraban que Valentina y Ekaterina no eran madre e hija y, que por lo tanto, los que la joven siempre había considerado sus hermanos, tampoco lo eran.
La explicación a todo esto es un error médico del hospital de maternidad soviético. Este la cambió al nacer con Svetlana Gachegova, una de sus amigas de la infancia.
Ante tal noticia, Svetlana se ha mostrado desvastada y ha declarado, según publica el diario británico Daily Mail, que "prefiere olvidar lo ocurrido en el programa". Además, sus padres biológicos ya han fallecido.
Por su parte, Valentina se mostró cariñosa con la que se ha desvelado que es su hija biológica y ambas se fundieron en un abrazo. Sin embargo, ha expresado, según el mismo medio, que para ella Ekaterina siempre va a ser su hija.
Los afectados van a intentan emprender acciones legales contra el Ministerio de Salud de Perm. Cada uno exigirá una indemnización por daños morales de 10 millones de rublos (es decir, unos 136.000 euros).
Sin embargo, en otros casos similares, los tribunales rusos solo han ofrecido una compensación mínima.