Naomi Oni, la chica que sufrió un ataque con ácido en una calle de Londres el pasado mes de diciembre, podría habérselo echado encima ella misma, según el diario británico Dailymail.
La joven, de 20 años, sufrió importantes quemaduras en la cara, la cabeza, las piernas y los brazos y quedó parcialmente ciega, además de perder parte de su pelo y pestañas. Oni aseguró que fue atacada por una persona vestida con niqab, que le lanzó el ácido cuando salía de trabajar en una tienda de Victoria's Secret en un centro comercial de Stratford, al este de Londres.
Tras el ataque, la joven permaneció un mes ingresada en el hospital, sometiéndose a varias operaciones.
La policía británica, tras registrar el ordenador portátil de Oni, podría estar trabajando en la hipótesis de que fuera la propia Oni la que se produjo las heridas, ya que podrían haber descubierto que la chica había estado buscando en internet información sobre ataques con ácido antes de que le ocurriera a ella.
Las búsquedas incluían material sobre Katie Piper, la exmodelo que prestó su imagen para campañas en favor de las víctimas de ataques de ácido tras sufrir ella uno en 2008.
Pero familiares de Naomi niegan esta posibilidad y aseguran que es una "locura". "Los investigadores se están concentrando en planteamientos equivocados. Simplemente, están llegando a conclusiones estúpidas", asegura el novio de la joven.
"Que viera un reportaje sobre Katie Piper en su ordenador se debe al interés de Naomi por el maquillaje. Nada más", asegura una amiga de la familia.
La joven no quiere salir ahora de casa. "Siempre he tenido confianza en mí misma y me ha gustado vestir provocativa, pero ahora no quiero que nadie me vea. He dejado de ir en metro o en el autobús. Si tengo que ir al hospital, cojo un taxi", asegura.
Oni ha aparecido también en algún programa de televisión y ha conseguido que una firma de cosmética se haya ofrecido a operarla gratuitamente.
El portavoz de la policía asegura que la investigación sigue abierta.