Según informa Infobae, el pasado mes de febrero los bomberos de Pewsey, un pequeño pueblo a 128 kilómetros de Londres, acudieron a una llamada de urgencia. Un establo en que el vivían dos cerdas adultas y 18 cerditos estaba en llamas.
A pesar de que la edificación quedó totalmente calcinada, afortunadamente los bomberos pudieron salvar la vida de los animales, un gesto que los dueños de la granja prometieron agradecer.
Después de que pasaran algunos meses, los bomberos recibieron al fin su esperada 'recompensa' por parte de Rachel Rivers, la administradora de la granja. Un gran paquete de chorizos fue lo que recibió el cuerpo de bomberos de Peswey a modo de agradecimiento por salvar a un grupo de cerdos.
El equipo decidió colgar una fotografía de la carne en Facebook, lo cual desató la polémica entre los defensores de los animales y los que no ven nada malo en esta acción. Tras el revuelo, el cuerpo ha decidido eliminar la publicación y en su lugar ha escrito un mensaje de disculpa: "Respecto al reciente mensaje en esta página, reconocemos que pudo ofender a algunas personas y pedimos perdón", han afirmado.
Miembros de la organización Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA), ha emitido un comunicado en el que condenan la acción y afirman que los animales “no salieron mejor parados por salvarse del fuego si seis meses después fueron sometidos a la horrible experiencia del matadero", declara Mimi Bekhechi, directora de programas internacionales de la organización, quien dice que regalará salchichas veganas al cuerpo de bomberos.