"Señoras y señores, soy su capitán y me he quedado fuera de la cabina de control del avión", empezó a explicar el capitán a los 168 pasajeros del avión con destino Las Vegas, informa el Daily Mail.
El piloto del avión se tomó un descanso para ir al baño tras dos horas y media vuelo, pero no se imaginaba lo que iba a ocurrir. Cuando quisó volver a los controles, la puerta de la cabina se había estropeado y no pudo entrar. Con mucha calma y tras hablar con el resto de la tripulación, se dirigió a los pasajeros y les explicó la situació.
"Vamos a realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto internacional de McCarran". Uno de los pasajeros grabó el momento, y publicó el vídeo en Youtube: "Esto es una locura, pero es muy emocionante", decía el susodicho.
El copiloto se encargó de un aterrizaje, que tuvo lugar en torno a las 00:25 de la noche y no tuvo ningún herido. En ese momento, los 168 pasajeros estallaron en aplausos.
Jesse Dougherty, una de las pasajeras aseguró que nadie tenía "miedo" pero "sí existía una gran confusión". Afortunadamente, todo quedó en una anécdota.