No ha sido revelada la identidad de la víctima de 33 años que perdió la mano y parte del brazo a causa del ataque de un tiburón.
El bañista se encontraba buceando en la isla brasileña de Fernando de Noronha cuando sufrió el ataque del escualo. Inmediatamente fue trasladado al hospital, donde se le han producido varias operaciones pero su estado de salud es estable.
En declaraciones al diario brasileño Globo, el médico del hospital donde se encuentra ingresado afirmaba: “Por ahora no se tiene previsto darle el alta. A causa de la mordedura del animal, la herida está infectada y es necesario suministrarle antibióticos y cumplir con el ciclo de estos para ver la evolución del paciente”