Ariana Grande reconocía estar “destrozada” tras la explosión que se produjo después del concierto que ofreció en la ciudad británica de Mánchester en el estadio Manchester Arena. “Rota. Desde el fondo de mi corazón, lo siento mucho. No tengo palabras”, escribía la estadounidense en su cuenta de Twitter.
Después de este terrible suceso que se cobró la vida de 22 personas y dejó más de 50 heridos, Ariana Grande suspendía la gira ‘Dangerous Woman Tour’ hasta el próximo 5 de junio. Hasta el momento, el convierto que tenía previsto ofrecer el 13 de junio en el Palau Sant Jordi de Barcelona, está en el aire.
Según informa Indian Express, una cuenta dedicada a la artista ‘Ariana Updates’, Grande se habría ofrecido a correr con los gastos de los funerales de las víctimas del atentado, entre las que se encuentran varias menores de edad: "Ariana se ha acercado a los familiares que perdieron a sus seres queridos… Ella quiere pagar sus funerales”.
La joven regresó a su casa de Boca Ratón en Florida acompañada por su madre hasta que reanude su gira mundial.