Marinna Rollins, de 23 años, fue encontrada muerta en su apartamento, en Netherfiled Place, en Carolina del Norte, según ha publicado The New York Post.

Rollins junto a su marido, Jarren Heng, fueron detenidos después de que colgaron el vídeo en el que la exveterana de guerra licenciada por trastornos psicológicos, apareciera matando a sangre fría a su perro Cam.

Heng, de 25 años, soldado en activo, grababa la escena y reía, mientras Rollins ataba al perro y le disparaba cinco veces a quemarropa. Ambos fueron acusados por maltrato y crueldad animal.

La mujer, encontrada sin vida, pagó la pasada semana una fianza de 25.000 dólares para salir en libertad a la espera de ser juzgada.

La pareja llevó al pitbull a una zona boscosa para matarlo y después lo enterraron en el lugar, tal y cómo aparecen en el vídeo que ellos mismos grabaron alternando su turno delante de la cámara.

En otras imágenes encontradas por los investigadores, grabadas en el lugar, previas a la muerte del animal ambos aparecen bebiendo y planeando lo que iban a hacerle al cachorro, que le fue entregado a Rollins como parte de la terapia para recuperarse del estrés postraumático.