La investigación se inició el pasado mes de diciembre, cuando las autoridades encontraron 25 kilos de angulas vivas sin acreditación legal en un vehículo perteneciente a una empresa de acuicultura de la localidad sevillana Isla Mayor. Pesquisas posteriores descubrieron que dicha empresa legalizaba ejemplares ilegales al mezclarlos con angulas legales.
La empresa fue incapaz de acreditar durante una inspección de la Guardia Civil la procedencia de un número indeterminado de angulas. Intentando eliminar pruebas, los ejemplares vivos de angulas fueron arrojados a un cauce de derivación de aguas.
Miembros del Plan de Recuperación de la Anguila Europea en Andalucía están intentando salvar parte de las angulas vertidas para reintroducirlas en su medio natural.
Finalmente, 11 pescadores y 3 administradores de la empresa, todos ellos vecinos de Isla Mayor, han resultado imputados. La especie 'Anguilla anguilla' se encuentra en peligro de extinción y está prohibida su captura en cualquiera de sus fases de desarrollo en las aguas marítimas interiores y continentales de Andalucía