Según informa la web de la BBC, el caso de Andrea G conmocionó a la sociedad alemana en 2015 aunque los asesinatos ocurrieron entre los años 2003 y 2013.
En ese periodo, esta mujer dio a luz a sus ocho hijos pero los fue matando nada más parirlos. La forma de actuar, según relató con dudas e imprecisiones al tribunal fue siempre la misma, los tenía a solas en la cocina y a continuación los envolvía entre toallas y los escondía.
Los jueces siempre dudaron de su versión y de la de su marido aunque este ha sido absuelto del cargo de negligencia al que se enfrentaba. Los fiscales del caso les calificaron de "egoísmo sexual, indiferencia e insensibilidad".
El caso fue conocido gracias a la alerta de la familia que ocupó la vivienda donde el matrimonio vivió durante 18 años. Unas obras de reformas sacaron a la luz los restos de los ocho bebés.