Brittany Navarra, una joven californiana de 21 años, no soportaba más los ataques de celo que sufría al ver a su expareja, Thomas Hollier, con su recién prometida Krista Pike. Brittany Navarra, que por aquél entonces tenía 16 años, decidió poner solución a este drama, asesinar a la joven, tal y como publica Mirror.
Pero ella no quería mancharse las manos, por ello acudió a su amigo Dustin Gran, un joven iluso de muy fácil influencia. No se lo pensó dos veces, y obedeció a las órdenes de Brittany. El 14 de enero de 2008, Krista estaba esperando tranquilamente en casa de Thomas a que llegara de la escuela.
La pareja solía dejarse notas de enamorados en el espejo del baño. Ese día, Kriste escribió que Dustin Gran estaba merodeando cerca de casa. Tras salir del baño, la joven se sentó en el sofá para hacer la lista de la compra. Instantes después, Dustin Gran entró en la casa y golpeó y acuchilló brutalmente a la joven. Tras ello, el joven se echó varias fotos junto al cadáver, que posteriormente enviaría a Brittany, para verificarle el crimen.
Cuando Thomas regresó a casa, el joven encontró el cuerpo destrozado de su prometida. La noticia tuvo eco por todos los medios de comunicación de la ciudad. Pero Brittany y Dustin no se saldrían con la suya, ya que pocos días después fueron relacionados con el crimen.
La nota en el baño de Krista, y los mensajes y fotos en el móvil de Brittany, fueron totalmente decisivos para inculpar a la pareja de criminales. Aunque la joven tuviera tan solo 16 años, las autoridades coincidieron que sería juzgada como un adulto por la magnitud del asunto.
Pero los innumerables problemas legales retrasaron las fechas de juicio hasta el año pasado. El año pasado, Dustin Gran, ahora de 25 años, fue llevado a juicio. Fue declarado culpable. Posteriormente, en marzo de 2014, Dustin Gran fue declarado culpable de asesinato en primer grado. Tres meses después, un juez de California lo condenó a cadena perpetua sin la posibilidad de libertad condicional.
Dustin mostró poca emoción y se negó a hacer una declaración.
En septiembre de 2014, Brittany Navarra, ahora de 21 años, fue declarada culpable de asesinato. En febrero de este año, fue condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Los miembros de la familia de Krista hablaron con emoción sobre el alivio que suponía esta sentencia, y que toda la pesadilla al fin había acabado.