La adolescente más gorda de Reino Unido volvió este miércoles al hospital por no poder aguantar el dolor en sus piernas, según publica el diario británico The Sun.
Georgia, de 19 años y 300 kilos de peso, ha estado atrapada en su sofá durante semanas, puesto que su tamaño le impide levantarse y llevar una vida normal. Y esto le ha provocado una dolorosa celulitis infecciosa que le hacía estar "agonizando".
"La celulitis ha empeorado y hace que Georgia agonizando", asegura su familia. Pero Davis asegura no poder controlar lo que come: "La semana pasada lo pasé mal y comí demasiadas galletas. Me he perdido en la comida. No puedo abrir un paquete de galletas y comerme solo una; me las tengo que comer todas".
Georgia tuvo una intervención quirúrgica y una estricta dieta seguida por especialistas, en la que perdió casi 100 kilos. Ya en casa y sin ningún control alimenticio, la inglesa volvió a recuperar el peso.