El derrumbe de un edificio ubicado en el número 21 de la calle Rodríguez Arias en Palma de Mallorca ha dejado siete personas fallecidas y otras cuatro heridas, dos de ellos de consideración grave que han sido trasladadas a los hospitales de Son Dureta y Son Llatzer, según han informado fuentes del Servicio de Emergencias.
En la finca, de tres plantas, vivían ocho personas según consta en el padrón municipal. Aunque la Policía investiga ahora si el censo estaba actualizado o todos los habitantes se encontraban en el inmueble en el momento del siniestro.
Hasta el lugar de los hechos, se han desplazado efectivos de Policía Local, del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil. La Unidad Canina del Instituto Armado se ha unido así a las labores de rescate en busca de personas que pudiesen estar atrapadas entre los escombros.
Acuden psicólogos de guardia
Servicios de Emergencias han aplicado el convenio firmado con el Colegio de Psicólogos de Baleares, a raíz del cual desplazaron a un psicólogo de guardia para atender a los familiares de las víctimas.
Los sanitarios han trasladado a dos heridos graves a los hospitales de Son Dureta y Son Llatzer mientras que otros dos leves han sido desplazados a centros de salud.
Fuentes de la Policía Local han informado que el siniestro ha provocado una montaña de seis metros de escombros. Al parecer, vecinos del inmueble se habrían quejado de grietas registradas en el edificio. Hasta el momento, técnicos de Gesa-Endesa descarta el escape de gas.
Desde el Ayuntamiento han informado que el edificio no había pasado la Inspección Técnica de Edificación porque no le correspondía por antigüedad, el inmueble se encontraba en muy mal estado, con importantes grietas y serios problemas de estructura.