Ante los hechos, el fiscal José Luis Caterina ordenó a los policías ir al domicilio de Matías Messi para que prestara declaración a los efectos de determinar si ocurrió lo que había dicho en un primer momento y establecer si no había más personas en la lancha, explicaron las fuentes.
El fiscal Caterina ordenó entonces volver a intentar ubicar al hermano de Lionel Messi para que brindara explicaciones del hecho.
Al no lograr contar con su presencia y testimonio, el fiscal del caso solicitó una orden de detención por tenencia ilegal de arma calibre .380.