Jo-Anne llamó a su hermana pequeña poco antes de las Navidades y le pidió que le guardase el secreto de que estaba embarazada. Sin embargo, en respuesta, obtuvo una risa de Rebbeca que le comunicó que también estaba embarazada. "Ambas hemos estado siempre muy unidas y lo hemos hecho todo juntas, ¿Por qué no también el embarazo" bromea en un artículo publicado por el Daily Mail.
Las hermanas esperaron a la reunión de Navidad para contarle esta curiosidad a la familia y, poco después, empezaron a prepararse juntas para la llegada de Isabelle y Phoebe yendo a comprar juntas las ropitas para las bebés y comparando el crecimiento de sus barrigas. Cuando los médicos les dijeron que salían de cuentas con seis días de diferencia, les pareció una increíble coincidencia...pero no sabían lo que pasaría después.
La hija de Jo-Anne decidió quedarse en el vientre de su madre durante unos días más -exactamente seis días- para poder nacer prácticamente a la vez que su prima. Ahora, las madres están esperando con ilusión que llegue la primera Navidad de muchas que pasaran estas primas que son, prácticamente, hermanas.