"El muro es un mensaje en sí mismo. No necesito escribir 'Palestina libre' o algo así, algo realmente directo (...) que la gente ignorará", ha explicado el responsable del grafiti en declaraciones a Reuters. "Simplemente pinto lo que suelo pintar y quizás la gente empiece a mirar el fondo y a observar los alambres de púas y a la gente atrapada aquí. Tal vez eso funcione mejor", ha argumentado.
El muro de Belén se ha convertido en un escaparate para el arte de protesta que ha permitido expresar los temores de los palestinos respecto al muro levantado por Israel en Cisjordania que denuncian como una apropiación de su territorio. Los israelíes argumentan que esta barrera es un defensa contra los atentados palestinos.
Entre los murales pintados en la barrera que se cree que son obra de Lushsux está uno que muestra a Trump besando una torre de vigilancia israelí y otro que lo representa colocando su mano sobre el muro y pensando en construir un vallado similar en la frontera con México.