Al no encontrarla, la prima de Romina Celeste (asesinada en Lanzarote) se puso en contacto con el marido de ésta para preguntarle por su paradero. Raúl le contestaba que estaba completamente “borracho” y le hablaba de sus dificultades para ir a denunciar la desaparición de su esposa. “Ponte las pilas, su madre está llorando”, le insistía la prima que, hoy, ha roto su silencio.
Andrea Servín, así se llama esta familiar, ha hablado en directo con ‘Cuatro al día’. Lo que más le llamó la atención de la conversación que tuvo con él fue que Raúl no se movía de su casa: “Decía que estaba desesperado pero no hacía nada. No me creí su versión porque a todos nos resultaba muy raro que Romina hubiera desaparecido así. Ella siempre llamaba a su familia para hablar con sus hijos”.
Además de emitir esta última conversación, Cuatro al día ha presentado nuevas pruebas del crimen. Ésta es una imagen sacada de la instrucción del caso que ha hecho creer a los investigadores, por la presencia de arañazos en cuello, cara, barbilla y brazo, que Romina se defendió antes de morir.
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