Noche intensa en la sede del Partido Popular de Madrid. La Policía registra palmo a palmo el edificio en busca de documentos o posibles facturas que prueben que las obras que se llevaron a cabo allí, se pagaron con dinero negro. A las nueve de la noche de ayer, un secretario judicial y efectivos del Cuerpo Nacional de Policía se personaron en la sede del PP, en la madrileña calle de Génova. Los ha enviado el juez Ruz, instructor de una pieza separada del caso Gürtel sobre la supuesta contabilidad B de los populares. El magistrado busca facturas sobre las obras de reforma de este edificio, realizadas entre 2005 y 2011 y que sospecha se pagaron en dinero negro a la empresa Unifica. Algo que se niega desde el partido. El arquitecto Álvaro Urquijo, titular de la empresa Unifica, declaró ante el juez a principios de la semana. Cubría su rostro con un casco y sus explicaciones no convencieron al juez. Su nombre aparecía en los papeles de Bárcenas asociado a un total de 880.000 euros en dinero negro como parte del pago de esas obras de reforma. De confirmarse este extremo, habría cometido un delito fiscal. Desde el PP aseguran estar dispuestos a entregar toda la documentación que le sea requerida por el juez.