Esta organización considera que el Ministerio Público debe actuar ante "el constante y permanente desafío al Estado de Derecho, de amenazas y coacciones a las instituciones". A juicio de Bernard, no existe precedente de una situación parecida desde "el golpe de Estado del 23-F".
Además, Manos Limpias considera que el decreto de convocatoria de elecciones, con apariencia formal de legalidad, constituye un "claro fraude de ley", pues conlleva el mensaje plebiscitario que Artur Mas pronunció ante los medios de comunicación para dar a conocer el decreto de convocatoria, cuyo contenido se adjunta a la denuncia presentada.
La denuncia se presenta concretamente por los delitos de amenazas y coacciones contra las instituciones del Estado y el delito de sedición "en su grado de tentativa, conspiración y provocación", que conllevan pena de prisión.
En el texto de la misma también se señala que el propio Rey ha reconocido que la actitud del mandatario catalán es "irreconducible", por lo que Manos Limpias considera que todos los esfuerzos de las instituciones para atajar "las deriva secesionista" han resultado baldíos "y el choque frontal de trenes es inevitable".