Entre los agentes arrestados hay un mayor del citado cuerpo policial. Se investigan supuestos sobornos y coacciones a los empresarios de bares de copas y discotecas de Palma.
Los agentes arrestados, supuestamente, cobrabar mordidas ante irregularidades en locales nocturnos, chantajes, amenazas o sexo gratis en prostíbulos a cambio de hacer la vista gorda. Muchos de ellos ya se vieron implicados en una investigación similar en 2013. Desde entonces hasta 50 agentes locales se han visto salpicados por esta investigación.
En Calviá, en otra trama paralela, hemos visto hasta un policía dejando supuestamente droga en un local justo antes de una inspección. Una prueba grabada por las cámaras de seguridad del local.