La comisión de expertos designada por el Gobierno para el Valle de los Caídos ha propuesto, sin unanimidad, que el cadáver del dictador Francisco Franco salga de la Basílica. Los expertos plantean sacar los restos para que sean enterrados donde decida la familia. Además, la comisión ha resuelto que el cuerpo de José Antonio Primo de Rivera permanezca en el Valle por ser víctima durante la guerra. Tras las conclusiones de la Comisión, la iglesia debe decidir si autoriza cualquier movimiento. En caso afirmativo, el caso se elevaría posteriormente al Parlamento.
En el informe de la Comisión, hecho público este martes, los expertos proponen que los restos del dictador Franco salgan de la Basílica del Valle para que sean enterrados donde decida la familia.
"Se recomienda que los restos de Franco sean llevados al lugar que designe la familia o el que se considere más adecuado", ha anunciado uno de los autores del informe, quien ha recordado que "el general Franco es la única persona que sin haber fallecido en la guerra está enterrado en la Basílica".
Sin embargo, sobre José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange, este estudio recomienda mantenerlo en el Valle al ser víctima durante la guerra, pero sin ocupar un lugar destacado sobre el resto de fallecidos.
La Comisión asegura ser consciente de "la dificultad de revertir la situación de los enterramientos. Cualquier actuación del Gobierno dentro de la Basílica exige una colaboración por parte de la Iglesia quien debe dar la preceptiva autorización para cualquier cosa".
A partir de ahí, las conclusiones recuerdan que el resto del Valle sí es competencia del Estado por lo que han recomendado llevar a cabo una labor de resignificación del lugar en el que se rinda homenaje a las víctimas de los dos bandos con la creación de un mural con el nombre de todos los caídos en la contienda o un "centro de interpretación" entre otras medidas.
Es necesario "resignificar el conjunto del Valle porque hasta ahora ha tenido una memoria de parte", han dicho los miembros de la comisión durante la presentación en el Palacio de la Moncloa.
Sin unanimidad en las conclusiones
Pese a todo, las conclusiones de la Comisión no han contado con el respaldo de todos sus integrantes. Los miembros Miguel Herrero de Miñón, Feliciano Barrios y Pedro González Trevijano han emitido sus votos particulares sobre los restos del dictador.
Así, Herrero de Miñón ha asegurado que "la exhumación es, al menos hoy, inoportuna y contribuiría a dividir y radicalizar la opinión pública más allá del consenso parlamentario"
Además, ha señalado que "una parte no pequeña de los españoles consideraría que supone una descalificación de un largo periodo de la historia de España".
Tras las conclusiones, la comisión ha supeditado cualquier decisión, primero, a la autorización de la iglesia al ser la autoridad competente en un lugar de culto, y, después, a que el Gobierno alcance un consenso parlamentario sobre el caso.