Una semana después de que Gallardón cuestionara la conveniencia de que la infanta haga el paseíllo (baje por la rampa que lleva a los juzgados de Palma), el ex socio de Urdangarin le dice que mejor sería que "en lugar de afanarse en esos desvelos ajenos al proceso, se hubiera ofrecido voluntario para prestar declaración como testigo". Y eso es lo que le pide al juez. Que cite a Gallardón. La defensa de Torres insiste en que los negocios de Nóos eran legales y, a a desesperada, lo que busca es que el ministro lo avale con su palabra. "Es evidente que existía una relación entre Urdangarin y el actual Ministro de Justicia"... afirma el abogado de Torres en un escrito que (fiel a su estilo) acompaña con correos, fotos y abundante correspondencia entre ambos. Están, por ejemplo, las cartas de invitación y agradecimiento de Urdangarin a Gallardón por presentar y prologar un libro que escribió con su socio Diego Torres. También hay otra en la que el Duque de Palma rechaza la oferta del alcalde de Madrid a liderar la candidatura olímpica 2016, y le sugiere un candidato alternativo. Gallardón, hoy, se ha negado a responder si estaría dispuesto a declarar. El juez Castro tiene la última palabra.