El primero de los dos accidentes sucedió pasadas las once de la noche del domingo cuando un vehículo ocupado por una pareja, el conductor de 23 años y una copiloto de 22 años de edad, colisionó con una motocicleta en la Gran Vía de Germanías en Valencia.
Según recoge Las Provincias, los ocupantes del vehículo se dieron a la fuga con el coche y sin auxiliar a los dos jóvenes que circulaban con la moto, heridos y que quedaron tendidos en la calzada.
Minutos después, este mismo vehículo chocó contra un taxi en la confluencia de la avenida de Maestro Rodrigo y la calle Valle de la Ballestera, también de Valencia. El taxista y los dos clientes, sufrieron heridas de diversa consideración.
El conductor del vehículo causante de los dos accidentes fue detenido tras dar positivo en el control de alcoholemia que le realizó la Policía Local. Lo sorprendente de la historia sucede cuando el individuo convenció a la joven que le acompañaba para que dijera a la policía que ella conducía el coche. Una mentira que fue desmontada por los agentes cuando interrogaron a los dos jóvenes por separado.
La chica cuadriplicaba la tasa máxima de alcohol y estaba muy aturdida debido a su estado de embriaguez. Por su parte, el conductor dio un resultado de 0,54 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, el doble del máximo permitido. Los dos jóvenes resultaron ilesos.
Los agentes también realizaron al conductor el test salival de detección de drogas, ya que también presentaba síntomas de haber consumido alguna sustancia estupefaciente. La chica manifestó que llevaban dos días de fiesta y habían tomado gran cantidad de alcohol.