La presidenta Esperanza Aguirre ha anunciado hoy que los tres diputados regionales imputados en el caso Gürtel -Alberto López Viejo, Benjamín Martín y Alfonso Bosh-, han abandonado el grupo parlamentario popular, y que los ex alcaldes de Boadilla y Pozuelo Arturo González Panero y Jesús Sepúlveda dejan también sus grupos municipales.
Esperanza Aguirre ha dicho que ha pedido a los diputados imputados que devolvieran sus actas, pero ello La presidenta regional ha hecho es de la Asamblea, justo antes de entrar en el hemiciclo donde no están hoy los tres parlamentarios imputados al no acudir a la sesión.
Aguirre ha señalado que la "decisión política que han tomado es la mejor para el partido" y ha ismo momento", ha anunciado la presidenta.
Una víctima
El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, considera que la trama 'Gürtel' es una "oportunidad" para que el Partido Popular demuestre que es "capaz de luchar contra la corrupción", "depurarse por dentro" y "eliminar aquellas partes que puedan estar intoxicadas" en el partido. Sin embargo, no se materializan las palabras.
Al igual que el presidente de su partido, Mariano Rajoy, el portavoz del PP considera que su partido ha sido "víctima" de una serie de personas que "se han aprovechado" para "financiarse a ellas mismas". "Tenía razón Mariano Rajoy: Esto no es un sistema de corrupción para financiar el PP, aquí hay algunas personas que se han financiado por ellas mismas a costa del PP", remachó.
Montoro señala a Rubalcaba
El coordinador de economía del PP, Cristóbal Montoro, ha afirmado en el Foro Cinco Días que el objetivo del 'caso Gürtel' es "exterminar al adversario político" y ha apuntado a que el director de esta estrategia puede ser el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
No obstante, Montoro ha admitido que en su partido "hay unos cuantos chorizos como también los hay en todas las casas" y afirmó que "eso hay que sacarlo y extirparlo".