La chica, que está en buen estado de salud, según han confirmado fuentes de la Guardia Civil, está siendo atendida por el equipo especializado en mujeres y menores de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial. La joven, que ha estado en paradero desconocido desde hace más de 36 horas, ha tenido su teléfono móvil desconectado durante este tiempo, y no ha trascendido si ha viajado fuera de Granada y su área metropolitana donde, en el municipio de Armilla, reside junto con su abuela materna.
La madre de la menor, María Jesús Fernández, vive en Almuñécar, en la costa granadina, donde trabaja en un restaurante. La familia ha estado distribuyendo por las calles de dicha localidad y en los medios de comunicación fotografías de la menor desde que puso el caso en conocimiento de la Guardia Civil en la madrugada del viernes.
La desaparición se produjo la noche del jueves, cuando la chica llegó a casa tras haber cenado con una amiga y su novio, quienes la acompañaron hasta las inmediaciones del domicilio de su abuela materna. Al entrar en el domicilio, la menor dijo a su abuela que iba a tirar la basura y a buscar a su perro, pero no volvió a la casa.