Un joven de 17 años de Ontario (Canadá), le regaló a su padre, Lance Perkins, una factura de 7.625 dólares por Navidad. Se gastó esta fortuna comprando puntos en el FIFA para mejorar su equipo ya que creía que no le cobraban por cada movimiento ni por cada vez que entraba en el juego.
El padre afirmó estar totalmente abrumado al recibir la factura del banco y ha prohibido que cualquier viodeoconsola o videojuejo entre en su casa. Pese a que se mostró muy enfadado con su hijo, declaró que también está tan afectado como él.
Perkins contactó con su banco para explicarles lo que había pasado e intentar buscar una solución. Sin embargo recibió la mala noticia de que no había nada que hacer al menos que quisiera acusar a su hijo de fraude. Lo intentó también poniéndose en contacto con Microsoft, pero desde la compañía le dijeron que le cobrarían la factura a pesar de que su hijo sea menor de edad.