Este chester no es un sofá cualquiera. Es mucho más que un sofá. Es un personaje invertebrado que sentará las reglas implícitas y fundamentales de una conversación 'tú a tú' entre Risto Mejide y sus invitados, bien parecida a un “combate civilizado” en el que cualquiera de las partes puede salir perdiendo.
"Yo no estaría dispuesto a sentarme en un sofá conmigo mismo"
Éste es el riesgo que ha corrido Risto Mejide al viajar con su chéster por toda España para encontrarse con personajes de la talla de Rodríguez Zapatero, Iñaki Gabilondo, Jorge Lorenzo, Cristina Cifuentes y un larguísimo etcétera. Invitados que también han sido muy valientes al atreverse a sentarse delante de él. “Me ha sorprendido mucho que nos dijeran que sí. Que Zapatero dijera que sí. Yo no estaría dispuesto a sentarme en un sofá conmigo mismo”, ha dicho el publicista, siendo muy consciente de que es un interlocutor sin pelos en la lengua.
"Gabilondo me puso en un aprieto me temblaban las canillas"
Lejos de intimidarse, los invitados le han devuelto la pelota. Muchas veces y, sin que sirva de precedente, Risto se ha sentido intimidado. “Gabilondo me puso en un aprieto. A mí también me temblaban las canillas. En este programa he quedado en evidencia por darme cuenta que sé menos de lo que creía saber y eso me gusta porque me ha ayudado a reflexionar y a cambiar”.
La clave de estas entrevistas es la improvisación. "Os aseguro que no iba con un esquema previo. Yo no tenía ni idea de lo que íbamos a hablar", ha concluído el publicista, asegurando que no necesita vender este producto porque "se vende por sí mismo".