Con mucho misterio, Frank ha procedido a leer el resultado de las votaciones y más de uno se ha llevado una sorpresa. A Mª Ángeles le ha sabido fatal ser la última del ranking, Enrique se ha quedado con mal sabor de boca con su tercer puesto y Cristina se ha emocionado muchísimo al saber que era la ganadora semanal y que había conseguido los 3.000€ de premio.
Frank apuesta por una velada musical
Frank no es un gran cocinero y ha optado por una cena llena de sorpresas para intentar dejar a sus comensales impresionados y provocar temas de conversación. De primero ha preparado unas cigalas al estilo de Frank, que no eran cigalas, eran gambones. De plato principal un pollo ecológico con cigalas llamado mar y montaña y de postre se ha marcado un Olé tú que no tenía mucho misterio.
Mª Ángeles saca su lado más cañero en el garaje de Frank
Dispuestos a encontrar algo con lo que sacar punta a la cena de Frank, Enrique y Mª Ángeles han ido a cotillear su casa y se han encontrado con una moto chulísima en el garaje. A los invitados les ha impresionado la belleza de la moto “Por lo menos en algo tiene buen gusto” y Mª no ha dudado en subirse a lomos del vehículo.
Frank se derrumba al saber que Enrique y Mª Ángeles han visto su moto
Superado el tema conflictivo de las cigalas, Enrique le ha comentado a Frank que habían visto su moto y el anfitrión se ha roto por completo. Estaba tan afectado que ha tenido que abandonar la mesa y ha sido Begoña la encargada de ir a tranquilizarle. ¿Por qué lloraba Frank?
Eurovisión cierra la noche musical de Frank
Dispuesto a que sus invitados supieran algo más sobre su pasión por la música, Frank ha montado un escenario en su jardín para que todos juntos cantaran y bailaran algunos de los grandes temas eurovisivos.