Tras la noche murciana de Paco, ha llegado el momento de la verdad y el anfitrión ha procedido a la lectura del premio. Mari Carmen se ha quedado planchada cuando ha visto que era la última del ranking, a Lidia le ha sentado fatal empatar con Pepe y Lin no podía creer que su cena china hubiera sido la ganadora del premio. Lin se ha ganado a los comensales con su dulzura y simpatía y está deseando celebrar su cumpleaños viajando a China para ver a su familia.
Paco es un hombre muy de su tierra y ha querido homenajear a la huerta murciana en su menú. De primero ha preparado un ‘Timbal de la tierra’ (el clásico zarangollo murciano con jamón serrano), como plato principal ha realizado un ‘Mar y huerta’ (Bacalao con pisto murciano) y ha cerrado su menú con unos riquísimo ‘Al dulce limón’ o Paparajote murciano, el tradiconal postre de Murcia.
Pepe ha querido homenajear a su querida Murcia con una cena muy de la huerta y le ha puesto un broche de oro con una tradicional fiesta murciana. Pepe ha aparecido vestido de huertero, ha invitado a sus invitados a vestirse con los trajes regionales de la región y todos juntos se han marcado unas jotas murcianas.
Paco estaba encantado con el resultado de su versión moderna del zarangollo murciano, pero en el momento que Pepe ha considerado que era un plato muy básico para un concurso se ha terminado el buen rollo. El anfitrión no se ha tomado muy bien la crítica de Paco, pero peor se lo ha tomado Lidia quién no admite que nadie se meta con “su Paco” y le ha plantado cara a Pepe de una forma desproporcionada.
Pepe ha presentado a sus comensales su original paparajote y se ha llevado una decepción porque Violeta ya lo había probado y no ha podido gastarle la broma de la hoja del limón. Sin embargo, Lidia estaba feliz porque era la primera vez que probaba el postre más típico de su tierra y le ha encantado. Eso sí… ¿Habrá considerado Pepe que el paparajote es un plato de concurso?