Rocío Ramos-Paúl ayudará a Karla y Renzo, un matrimonio peruano quienes no tienen establecidas unas rutinas con los horarios de alimentación. Debido a esta desorganización, su hijo pequeño, Stefano, se ha convertido en el centro de atención de la casa. Los padres, desesperados, ya no saben cómo frenar sus trastadas.
Karla y Renzo tienen dos hijos, Karen, de 13 años y Stefano de 5. El pequeño es un niño muy movido que parece un contorsionista por su afición a meterse en espacios pequeños. Es el rey de la casa y sus travesuras se suceden sin que sus padres sepan ponerle freno. La hija mayor tiene que vigilar permanentemente a su hermano y asume más responsabilidades de las que le corresponden. En esta casa, la falta de horarios y hábitos hace necesaria la ayuda de Supernanny.
Con la ayuda de Rocío, este matrimonio, además de aprender a decir que no a su hijo, entenderá lo importante que es establecer unos límites. Además, Supernanny intentará potenciar el juego entre padres e hijos.