La pureza de la mujer es algo que los gitanos adoran por encima de todo y que vertebra su vida y sus relaciones sociales. Tanto es así que la gitana que no llega virgen y pura al matrimonio no se puede casar. "Mi nieta se casa con el primer novio y eso es un orgullo para nosotros", dice la abuela de 'La Vaca'.
Su novio es Josan y tiene 22 años. "Siempre dije que me iba a casar con una paya no con una gitana. Pero las payas son muy independientes, les tienes que dar mucha libertad y a partir de ahí empecé a buscar una mujer gitana. Yo no le tengo que decir nada porque ella ya sabe lo que tiene que hacer", dice Josan. 'La Vaca' llevará tres vestidos en su boda como manda la tradición. Una familia gitana se puede gastar hasta 20.000 euros en los vestidos de la novia.
"A la gitana le gusta arreglarse y ponerse guapa. Las payas buscan más la comodidad y la sencillez. A la gitana, no le importa estar incómoda", cuenta la madre de 'La Vaca'. Sus padres se han gastado 3.000 euros en los vestidos de 'La Vaca'.
El pañuelo es la única prenda que no puede hacer un sastre payo. La madre y la tía cosen el pañuelo que certificará la virginidad de 'La Vaca'. Inés tiene miedo a la prueba. "De pequeña, vi unos cuantos porque mi abuela era jardinera", cuenta 'La Vaca'. "Ella está asustada pero está feliz porque va a honrar a toda su familia", cuenta una tía. El pañuelo lo paga el novio y se lo quedará la suegra de la novia. La novia gitana vive momentos muy duros y mucha tensión.
Las horas previas a la prueba del pañuelo son las más estresantes para el padre de la novia. Tiene que preparar todo y espera unas 800 o 1.000 personas. El novio esperará fuera y las mujeres entran con la novia. La llegada de la novia es uno de los momentos más esperados. Enseñan el pañuelo antes de entrar a la sala. La 'jardinera' o 'ajuntadora' es la mujer que hace la prueba del pañuelo. Pasa de una generación a otra.
¡La novia corona a toda la familia!
Tras la prueba del pañuelo, toda la familia celebra el resultado. La virginidad es "el bien más preciado" de la etnia gitana. "Se supone que la mujer es virgen y el hombre no porque él tiene libertad", cuenta ¡La Vaca'.
Tras la prueba del pañuelo, llega la boda oficial. Los novios se casan en Huesca. El cura de la catedral de Huesca que oficia la boda católica en caló, la lengua de los gitanos. Son tres días de celebraciones que desembocan en una fiesta multitudinaria de más de 600 invitados.
Josan y 'La Vaca' tuvieron su primera hija nueve meses después. Su padres deciden llamarla Susana por la hermana mayor de Inés que murió con diez años. "La barbie", como la conocen, ya es una niña gitana que comienza su vida con la responsabilidad de ser la depositaria del honor de toda su familia y que nació nueve meses después de la boda.