Esto es un Mundial. Así de claro nos lo ha dejado la 'débil' Suiza en el debut de 'La Roja' en 'su' Mundial. España, con cinco centrocampistas y Villa en punta, salió a realizar su juego. Ese que nos ha enamorado durante años; el mismo que nos ha hecho levantar una Eurocopa. Con el 'tiki-taka' España mantuvo controlado el encuentro durante toda la primera mitad. La mejor ocasión estuvo en las botas de Piqué: un genial pase de Iniesta le llegó al culé, que tras un espectacular recorte, se encontró con el portero suizo Benaglio. Los helvéticos no se asomaron al área ibérica durante los primeros 45 minutos, mientras los de Del Bosque no acertaban de cara al gol.
En la segunda mitad 'La Roja' volvió a salir fuerte, moviendo el balón y llegando -sin excesivo peligro- al área de los centroeuropeos. Pero todo se desmoronó en el minuto 56. Un saque de puerta suizo le llegó a Derdiyok que se coló en el área. Iker salió rápido, pero su rechace rebotó de nuevo en el centrocampista suizo y el balón llegó a Gelson Fernandes que chuta. Piqué intenta detener el balón por todos los medios (incluso con los brazos), pero de nuevo el rechace favorece a Gelson, que marca el 0-1, poniendo en el luminoso de Durban la gran sorpresa del torneo (España es la única de las 'favoritas' que ha caído derrotada en el primer encuentro). Pese a que no hay que 'responsabilizar' al árbitro, el gol suizo fue en fuera de juego. Cuando Iker rechaza el balón, el esférico vuelve a dar en Derdiyok, y de ahí el balón llega a Gelson. Cuando esto ocurre, solo hay un jugador español (Piqué) entre el balón y la línea de gol.
La reacción de 'La Roja' no se hizo esperar: primero con juego, luego, con épica. Iniesta lanzo un disparo que salió lamiendo el poste; Torres no acertó tras un buen pase de Villa desde la izquierda y lanzó fuera y Xabi Alonso estrelló con violencia un chut desde fuera del área en el larguero. Luego llegó la segunda ocasión de Suiza... y casi el segundo tanto. La suerte se alió con España cuando Derdiyok lanzó al poste. A partir de ahí a 'La Roja' se le apagaron las ideas. La única solución eran balones a Navas (que había salido, junto con Torres, en la segunda mitad por Silva y Busquets) para que éste buscase centros inofensivos al área. La épica no es el estilo de 'La Roja'. No hubo resultados.
Así, España tendrá que derrotar a Honduras y ver qué hacen Chile y Suiza (líderes del grupo) en su enfrentamiento, para afrontar con garantías el tercer partido ante los de Bielsa. Si había que perder un partido, era éste, y no en semifinales como nos ocurrió en la Copa Confederaciones. España sigue siendo el que mejor juega... solo falta acertar de cara al gol. Lección número uno, recibida... y esperemos que aprendida para que no se vuelva a repetir.