Le abre la puerta una mujer alta y rubia y él pregunta por Jennifer Williams. Ella responde que quién pregunta por ella y él contesta: "Soy Cyrus, Cyrus Harry. Antes me llamabas Cy... si eres tú realmente". Ella trata de cerrar la puerta, pero al hombre le da tiempo para explicarse.
El paciente trata de encontrar a una Jennifer Williams con la que pasó una semana hace 23 años. Al hombre le ha tocado 42 millones de dólares en la lotería y todavía confía en encontrar al que fuera el amor de su vida.
Mientras tanto, la madre de Cuddy amenaza con demandar al Hospital por mala praxis cuando se le operó de la prótesis de la cadera. Esta demanda compromete el futuro de Cuddy y sus médicos. La directora del Princeton-Plainsboro trata de evitar la denuncia, pero su madre no parece dar su brazo a torcer.