"Aitor es muy machista, no me deja rehacer mi vida con nadie", explica Ana Isabel, la madre de Aitor. Ella lleva seis años divorciada, pero él no consiente que tenga amigos, ni pareja. "Alguien tendrá que poner orden aquí, no puede ser esto una casa de putas", exclama el joven, que asegura que cuando ve a hombres con su madre le entran "ganas de matar".
Aitor empezó a centrar la ira contra su madre cuando, después de la separación de sus padres, ésta le mandó a un centro de acogida. "Los servicios sociales me aconsejaron que lo mejor es que estuviese en un colegio donde no pudiera hacer lo que él quisiera, donde tuviese las normas que en mi casa no cumplía", explica. Él, sin embargo, asegura que su madre le abandonó. "Por ti no somos una familia", le acusa.
"Empecé a consumir porros con trece años, la cocaína la probé a los catorce", confiesa Aitor, que dice que consigue el dinero "robando o quitándoselo a mi madre". "Me drogo y robo porque el tiempo que estoy haciendo eso no pienso en la mierda de vida que tengo, y en la mierda de familia que tengo", le espeta el joven a su madre.
Pedro García Aguado llega a casa de Aitor y Ana Isabel para encarrilar la vida en familia de ambos. "Da un poco de respeto, pero a mi si viene un tío de dos metros a decirme que hacer, pues si no me gusta no lo voy a hacer como un perrillo faldero. Yo no me achanto", explica.
'Hermano Mayor' ha preparado distintas actividades a Aitor, que poco a poco ha aprendido a ser más activo, colaborativo y humilde. Así, ha ayudado a trasladar ocas, ha asistido a una clase de peluquería, ha entrenado con un equipo de baloncesto y trabajado como dependiente en una tienda.
Finalmente, Aitor ha decidido hacer borrón y cuenta nueva y empezar de cero con su madre. Así, le ha pedido perdón, le ha asegurado que va a cambiar. Y su madre va a estar siempre ahí para apoyarle.