Un soltero de ‘First Dates’ se rompe al hablar de los motivos de su separación: “Ay, qué me entusiasmo”

  • Rosa María, al saber que Ángel no tiene coche: “¿Dónde vamos sin coche?”

  • Ángel pide un pasodoble para seducir a su cita en ‘First Dates’: “Te llevo yo a ti”

  • A Rosa María le asusta que Ángel no pare de temblar durante la cita: “Si no te tranquilizas, no te doy el sí”

Ángel ha sentido que había encontrado a la mujer de su vida cuando Rosa María ha cruzado la puerta de ‘First Dates’ vestida de blanco y no ha parado de temblar desde ese momento. El soltero es muy sensible e igual que ha sentido mucha emoción al conocer a su cita, se ha roto al contarle a Lidia Torrent el motivo que rompió su matrimonio.

Ángel está convencido de que las mujeres lo único que quieren es encontrar a un hombre con dinero y viajar, y cero problemas. Y él lo que quiere es una mujer con la que compartir las cosas. Cuando Lidia Torrent le ha preguntado por sus experiencias sentimentales, él le ha querido contar el motivo por el que se rompió su matrimonio y las lágrimas han comenzado a brotar de sus ojos “Ay, qué me entusiasmo”.

Ángel quería que sus hijos aprendieran su profesión “siempre he sido mecánico de motos” y su mujer se negó en rotundo “era pelea tras pelea hasta que yo dije se acabó y ella se fue con su madre”. El soltero tiene una buena relación con sus hijos, pero nos ha contado que se emociona con mucha facilidad.

Con la intención de que Ángel se recuperara pronto, Lidia le ha preguntado por sus gustos y él le ha confesado que le gusta mucho bailar pasodobles. Rosa María, su cita, es muy coqueta y asegura que no necesita peluquería porque ella se arregla sola, tiene hasta un curso de uñas de porcelana hecho.

Al verla, Lidia ha tenido la sensación de que era “un ángel caído del cielo” y Ángel algo muy parecido. Su primera impresión ha sido buenísima “una cosa divina para mí, una cosa preciosa, tiene un cuerpo divino, me ha llenado por los cuatro costados”. Rosa María también estaba encantada “Tiene cara de bondad y de bueno”.

Ya sentados en la mesa, Rosa María y Ángel han comenzado a conocerse un poquito mejor y han encontrado cosas que les gustaban y cosas que no. A Rosa María le ha gustado que a Ángel no le gustara el fútbol porque su anterior pareja se había convertido en el rey del mando y eso no le hacía gracia, pero le ha parecido mal que su cita hubiera vendido su coche “un hombre sin coche no es independiente, ¿dónde vamos sin coche?”.

Ángel estaba maravillado con su cita y no ha dudado en mostrarle que estaba temblando desde el momento que le había visto. Algo que a ella le ha hecho pensar que no estaba muy bien de salud. No ha dudado en preguntárselo, pero lo único que ha conseguido saber es que Ángel está un poco sordo porque no entendía bien sus preguntas. El soltero no es mucho mayor que ella, pero siente que está muy mayor físicamente para estar a su altura de hecho, le ha dicho que si no dejaba de temblar no le iba a dar un sí a tener una segunda cita.

Un pasodoble separa a Ángel y a Rosa María para siempre

En mitad de la cena ha comenzado a sonar un pasodoble y Rosa maría se ha levantado convencida de que tenía que enseñar a bailar a Ángel. Sin embargo, él le ha confesado que lo había pedido él y le ha pedido que se dejara llevar. Rosa María se ha sorprendido mucho con el arte para el baile de su cita, pero no le ha gustado que siguiera temblando sin parar.

Ángel le ha dejado claro que quería seguir teniendo citas con ella, pero Rosa María no quería seguir conociéndole como pareja. Ha intentado ser delicada con él y parece que Ángel lo ha entendido.