Dependiendo de nuestros hábitos, tendremos una mejor o peor salud cardiovascular. No obstante, para mejorarla solo tenemos que incluir en nuestra rutina pequeños gestos que tendrán grandes resultados. Según explica un estudio presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología, comer habitualmente un poco de chocolate negro con aceite de oliva virgen extra, es un truco estupendo para tener una salud cardíaca de hierro.
Para realizar esta investigación, se necesitó la participación de 12 hombres y 14 mujeres que tenían al menos tres riesgos cardiovasculares, como por ejemplo ser fumador. Posteriormente, cada una de estas personas ingirió 40 gramos de chocolate negro durante 28 días.
Durante los 14 primeros días el chocolate contenía un 10% de aceite de oliva virgen extra y en los días siguientes, contenía un 2,5% de manzana roja. Ambos tipos de chocolate se repartieron de forma aleatoria entre los participantes del experimento.
Al concluir la investigación, los resultados arrojaron que consumir chocolate con aceite de oliva virgen extra estaba relacionado con el colesterol bueno. Además, ayuda a reducir la presión sanguínea y aumenta los niveles de las células progenitoras endoteliales circulantes, que son las principales responsables del buen funcionamiento del sistema cardiovascular.