Tensión en la nueva huelga general de Grecia

Cuatro/CNN+ 15/12/2010 13:39

Esta es la octava huelga general del año y el país se ha vuelto a paralizar. Es la muestra de rechazo de la ciudadanía a los recortes aprobados por el gobierno heleno para reducir el gasto y el déficit público. los principales aeropuertos del país, metro y transportes públicos han amanecido cerrados, incluidos los ferrys que conectan las islas griegas.

Los principales sindicatos públicos y privados estaban esperando una gran participación para demostrar su oposición al Gobierno, que está tratando de implementar duras reformas a cambio de un plan de rescate de la UE y el FMI de 110.000 millones de euros. Pero con una mayoría parlamentaria cómoda y con los siguientes pagos del rescate pendientes, no es probable que el gobierno socialista dé marcha atrás en su decisión.

Horas antes, el Parlamento de 300 escaños había votado a favor de unas medidas que pueden recortar los salarios en las compañías estatales de autobuses y ferrocarril y debilitan el poder de los convenios colectivos para permitir que prevalezcan los acuerdos a nivel empresarial.

"Necesitamos enviar al Gobierno el mensaje de que no aceptaremos medidas que sólo nos lleven a la pobreza y al desempleo", ha dicho Ilias Iliopoulos, secretario general del sindicato de funcionarios ADEDY.

"Tras la votación la pasada noche de las peores relaciones laborales de la historia en Grecia, avisamos de más acciones después de las vacaciones. No nos rendiremos, venceremos".

El primer ministro, Georgios Papandreu,

ha expulsado a un diputado de su equipo parlamentario por no respaldar al Gobierno en la votación. Pero su partido todavía cuenta con una cómoda mayoría de 156 votos, y habrá más ajustes para los presupuestos de 2011 la semana que viene.

Los barcos seguían amarrados en los puertos, los hospitales trabajaban con servicios mínimos y los ministerios cerraron por la ausencia de los trabajadores del sector público y privado. Con los paros en el transporte público, las carreteras principales hacia el centro de Atenas parecían aparcamientos enormes, mientras los conductores trataban de llegar al trabajo.

Ya que los periodistas se unieron a la huelga, no había noticias en televisión ni en las emisoras de radio. "Es bueno que la gente se eche a las calles. Nos han quitado nuestros derechos. La paciencia tiene sus límites, tenemos niños y préstamos que pagar", ha dicho el empleado de banco George Mihalopoulos, de 57 años, mientras esperaba el comienzo de una manifestación.

Los trabajadores estaban convocados para protestar contra las medidas de austeridad en otros países, como España y Bélgica, antes de una cumbre de líderes de la UE en Bruselas en jueves y el viernes.