El usuario puede controlar con el teclado una pequeña representación de este personaje histórico para asegurarse de que aterriza bien. André Jacques Garnerin dedicó su vida a volar en globo y al paracaidismo, una hazaña por la que sería recordado en la posteridad.
De hecho, poco más se conoce de él más allá de haber sido el primer hombre en saltar en paracaídas.
El 22 de octubre de 1797 miles de personas atestiguaron el primer salto de exhibición en paracaídas desde su globo de hidrógeno a 350 metros de altitud sobre París.
Su equipo estaba hecho de seda, parecía un gran paraguas reforzado y a diferencia de los paracaídas modernos, oscilaba de un lado a otro con violencia (como reproduce el 'doodle') al no contar con orificios de ventilación.
Después de este primer salto, André Jacques Garnerin realizó otros muchos; el más destacado, a unos 2.430 metros de altura sobre Londres empleando un paracaídas de 7 metros de diámetro. Asimismo, su mujer, Genevieve Labrosee, fue la primera mujer en saltar en paracaídas, un año después que su marido.
Garnerin falleció en 1823 de forma trágica cuando impactó contra una viga mientras preparaba un vuelo en globo dirigible.