La especie tiene similitudes anatómicas a los seres humanos de hoy en día, tales como pies diseñados para larga distancia, pero también tiene características simiescas, como hombros estrechos y los dedos curvos para ayudar a la escalada, según publicó The Independent.
El homo Naledi tenía 1,5 metros y unos 50 kilos, con rasgos del Australopithecus, los primeros en desplazarse de manera bípeda y que vivió en África desde hace más de 4 millones de años hasta hace unos 2 millones de año. La nueva especie parece haber tenido un cuerpo más delgado y menudo.
Los investigadores lo han llamado homo Naledi por el nombre de la cueva donde fue hallado. El nuevo homínido tenía un cerebro del tamaño de una naranja y creen que enterraba a sus muertos, un ritual característico del ser humano.
Los paleontólogos, bajo el liderazgo de Lee Berger de la Universidad de Witwatersrand, han identificado a mujeres, niños, ancianos y jóvenes entre los 15 individuos enterrados.
Todos presentan datos homógeneos, pero la datación exacta de los restos se sigue investigando y puede variar entre los 100.000 años y los dos millones.