En una entrevista concedida a Europa Press, De Jaraíz afirma que en los próximos años la compañía surcoreana va a convertirse "en uno de los principales proveedores de las marcas de automóviles", gracias a la fabricación de baterías, chasis, pantallas y diferentes piezas mecánicas de ayuda a la conducción o a la frenada, entre otros. "Todos los componentes eléctricos del vehículo son susceptibles de ser suministrados por LG", ha apostillado.
"Hace 20 años nadie conocía LG por sus televisiones, pero la empresa invirtió en la tecnología LCD y plasma. En el mundo de la automoción estamos en la misma situación. Las empresas están tratando de hacer más eficiente la tecnología de combustión, que es obsoleta, mientras que nosotros invertimos en una tecnología superior, más eficiente, que va a ser la sustituta. Ahora mismo nadie sabe que LG es líder en este campo, pero cuando el coche eléctrico esté en manos de la mayoría de la gente seremos conocidos por ello", añade.
El primer paso para este cambio revolucionario en la compañía coreana será una realidad con la llegada a las carreteras españolas del Opel Ampera --tras su hermano americano 'Chevrolet Bolt'--, un coche 100% eléctrico, con cerca de 400 kilómetros de autonomía en sus baterías, al que De Jaraíz se refiere como "el coche LG", ya que un 60% de los componentes del vehículo son de la marca coreana.
El presidente de LG Iberia tiene claro que esto "va a suponer un antes y un después en la industria de la automoción" y recuerda que España es uno de los principales fabricantes de coches de Europa, por lo que podría jugar un importante papel en esta transición. "La tecnología del coche de gasolina está agotada, el sector va a cambiar en cinco años más de lo que lo ha hecho en toda su historia, y ahí estará LG liderando este cambio tecnológico tan grande", asegura.
LAS PANTALLAS FLEXIBLES: UNA BATALLA ENTRE DOS
Otro de los temas que va a cambiar por completo el sector tecnológico en los próximos años va a ser el de las pantallas flexibles. Las principales compañías ya han empezado a mostrar sus prototipos e, incluso, algunos de los productos que llegan al mercado este 2017 --como la televisión Signature LG OLED W7-- disponen de pantallas con un gran grado de flexibilidad. Un primer paso de lo que puede llegar a convertirse en toda una revolución.
"Es algo en lo que estamos trabajando, para que nuestra tecnología OLED se pueda aplicar a los teléfonos y otros 'wearables'", ha señalado De Jaraíz, sin atreverse a poner fecha a la llegada al mercado de este tipo de productos, pese a que los rumores apuntan a que en el último trimestre de este mismo año podrían lanzarse los primeros móviles flexibles. Lo que sí se atreve a confirmar es que se trata de "una carrera entre dos empresas".
Jaime de Jaraíz --único no coreano entre los presidentes de las filiales de LG-- está convencido de que "el mercado reclama" este tipo de tecnología. "Va a ser una necesidad, pero no solo para teléfonos, sino también para prendas. Las pantallas van a estar muy presentes en nuestras vidas, mucho más allá de la idea del móvil que se pliega", ha aseverado.
Y precisamente de móviles también ha hablado De Jaraíz, coincidiendo con el inminente lanzamiento del LG G6 en el Mobile World Congress de Barcelona. Con este nuevo terminal, la marca pretende "ser relevantes en el mundo de la telefonía". "Queremos tener en este sector la misma relevancia que tenemos en el resto de electrónica de consumo", explica, sin dar muchos más detalles de la gran apuesta de la compañía en este sector.
UN HOGAR CONECTADO Y PENSADO PARA QUIENES NO LEEN LAS INSTRUCCIONES
El presidente de LG Iberia se confiesa: él tampoco lee las instrucciones de los electrodomésticos. Por ello, apuesta por un hogar conectado en el que cada uno de los dispositivos sea "fácil de utilizar y tecnológicamente relevante". El reto está en saber comunicar cada una de las funciones de estos aparatos, pero es consciente de la dificultad, ya que en una lavadora --por poner un ejemplo-- "hay más tecnología que en el Apolo", bromea.
La mayoría de los frigoríficos y lavadoras de LG se pueden entender directamente con el servicio técnico, enviando códigos de sonido para que se pueda solucionar a distancia el problema. Asimismo, la compañía cuenta con una app que permite poner la lavadora desde el móvil, ajustando el programa de lavado en función de una selección del tipo de mancha o de las necesidades concretas de cada usuario. Sin embargo, De Jaraíz reconoce que su uso aún es muy bajo.
"El problema de la tecnología es que muchas veces va un poco por delante de lo que puede asumir la media de la población. Hay herramientas que no se usan. En cualquier caso, si la mejora tecnológica es relevante poco a poco la gente lo acabará adoptando", añade el presidente, que ve en los asistentes virtuales para el hogar --como el Mini-Bot que lanzará LG en España previsiblemente en 2018-- una gran herramienta para simplificar el uso de todos los electrodomésticos conectados de la casa.
En lo que respecta a la gama blanca, ha querido destacar también la importancia de dar a los usuarios la certeza de que van a poder tener una lavadora, un frigorífico o un lavavajillas funcionando perfectamente durante mucho tiempo. En este sentido, recuerda que todos estos productos tienen una garantía de diez años, que se amplia a 20 en el caso de modelos CENTUM.
LA GUERRA EN EL SECTOR DE LAS TELEVISIONES
La 'guerra' entre los principales fabricantes de pantallas sigue dejando nuevos episodios, que se resumen en estos momentos en el enfrentamiento entre los televisores OLED de LG y los QLED de Samsung por hacerse con el mercado. En este punto, De Jaraíz retoma el ejemplo de los coches para marcar las diferencias: "La tecnología LCD es como la tecnología de combustión, es un motor de gasolina, que se puede hacer más rápido, más eficiente, pero que tiene una serie de limitaciones. OLED, por su parte, es el coche eléctrico".
"Lo que tiene que saber el consumidor es que en la tecnología LCD --donde LG sitúa a su principal competidor, QLED-- hay varias evoluciones y nosotros tenemos la última de ellas, que es Nano Cell, con un nivel de precisión de, al menos, el doble que el mejor de nuestra competencia. Lo que no se puede hacer en esta tecnología es que todos los píxeles se iluminen de forma independiente. Eso es lo que hacen las pantallas OLED", ha detallado el presidente de LG Iberia.
De Jaraíz explica que OLED permite que cada uno de esos píxeles, que no son ni siquiera visibles para el ojo humano, se enciendan y se apaguen con una corriente eléctrica. Así, cada pixel el capaz de estar totalmente encendido o apagado, consiguiendo "contrastes entre el negro y el blanco perfectos".
En este sentido, concluye que OLED "es el presente y futuro de la televisión" y "supone una revolución mucho más grande de lo que pueda parecer". Para demostrarlo, De Jaraíz asegura que la mayoría de grandes marcas van a incorporar modelos OLED en su gama más alta, lo que llevaría --según sus estimaciones-- a copar un 20 por ciento del mercado, que correspondería al segmento más 'premium'.