Investigadores del MNCN descubren cómo identificar los suelos que pueden almacenar más carbono

EUROPA PRESS 13/07/2017 11:32

Según precisa, los metoxifenoles son compuestos que provienen fundamentalmente de la lignina, una sustancia que forma parte de la pared de muchas células vegetales y confiere rigidez a las plantas. En este trabajo sobre la variabilidad espacial de la estructura de la materia orgánica del suelo a nivel molecular, los investigadores buscaban identificar los factores físicos, químicos o biológicosque se relacionan con el hecho de que _bajo las mismas condicionesclimáticas_ la capacidad para retener o estabilizar el carbono sea tan diferente entre unos suelos y otros.

"Los primeros resultados los obtuvimos al analizar lafamilia de los metoxifenoles. Tras identificar los 12 mayoritarios, descubrimos que sus diferentes proporciones definían una firma característica para cada suelo que se relacionaba con la cantidad de carbono que almacenan", ha explicado el investigador del MNCN Marco Antonio Jiménez.

Mediante la aplicación de modelos matemáticos, los investigadores han trabajado en suelos con diferentes propiedades físico-químicas sobre distintos sustratos geológicos y bajo diferente vegetación. En concreto, han calculado las proporciones de los doce metoxifenoles mayoritarios en 35 suelos de toda España.

"Los índices obtenidos, que expresan la diversidad o complejidad de la población de estas moléculas, pueden permitir la predicción del tiempo que el carbono permanecerá estable en los suelos estudiados", ha aclarado el investigador del MNCN. "Los Suelos con altos índices de diversidad de metoxifenoles, son los que contienen mayor contenido en carbono", ha añadido.

En esta línea, ha explicado que los suelos constituyen, junto al océano, el mayor almacén de carbono del planeta puesto que al caer al suelo las hojas de las plantas, que capturan el CO2 de la atmósfera, se transforman en sustancias orgánicas complejas que se degradan lentamente. Este carbono almacenado en forma de humus no se intercambia activamente con el de la atmósfera y puede permanecer cientos de años en el suelo.

Así, señala que la estructura molecular de la materia orgánica del suelo, que es muy variable en función de los tipos de humus, constituye un reflejo de la incidencia del conjunto de factores ambientales que condicionan la evolución de los ecosistemas y permite predecir muchas de sus propiedades, incluida las tasas de retorno del carbono del suelo a la atmósfera.

"Estos resultados preliminares contribuyen a una mejor evaluación de las características de los suelos. Características que pueden modificarse con adecuadas prácticas de gestión, conservación o manejo que se orienten hacia el aumento de su capacidad de retención del carbono", ha concluido.