La geografía y la evolución determinan la adaptación de los parásitos herbívoros, según un estudio

EUROPA PRESS 18/08/2016 12:45

Este hallazgo ayuda a entender hasta qué punto la geografía o los procesos de coevolución determinan por qué algunos organismos se alimentan de algunas especies y no de otras. Los resultados del estudio se publican en la revista 'PNAS'.

El primer autor del estudio, Joaquín Calatayud, explica que "aunque antes se creía que los ácaros araña desarrollan una alta especialización sobre particulares grupos de plantas durante largos procesos coevolutivos, los resultados de este estudio muestran que no es así".

"En lugar de la especialización evolutiva que se pensaba, estos ácaros se alimentan de diferentes especies de plantas dependiendo en gran medida de la co-ocurrencia de especies en las mismas regiones geográficas. Es decir, que estos ácaros no son muy escrupulosos con la comida: se alimentan de casi cualquier planta de las que tienen disponibles a su alrededor", ha detallado Sara Magalhaes, otra de las responsables de la investigación.

Este descubrimiento es particularmente importante porque demuestra que este grupo de herbívoros es capaz de pasar de utilizar un grupo de plantas a otro muy distinto sin muchas restricciones, según ha apuntado Calatayud.

El director del estudio, Joaquin Hortal, ha apuntado que los resultados hallados ahora demuestran que "los procesos biogeográficos que determinan que algunas especies y grupos estén presentes en unas regiones del globo y no otras son, por lo menos, tan importantes como los procesos ecológicos locales que determinan cómo las especies contribuyen al funcionamiento de los ecosistemas, si no lo son más".

"Esto contradice la visión clásica de estudiar las interacciones entre especies y el funcionamiento de los ecosistemas a partir tan solo de procesos locales, y nos lleva hacia una perspectiva más global de la ecología", ha destacado.

A su juicio, los resultados demuestran que para entender los procesos ecológicos que ocurren localmente, como las interacciones alimenticias entre especies, es necesario tener en cuenta procesos biogeográficos a gran escala.