La investigación ha sido llevada a cabo por científicos de la Universidad de Karlsruhe en Alemania. Tras cuatro años de investigación, según informa ‘RT’, han publicado los resultados de su estudio.
Según los investigadores, a casi todos los plásticos conocidos les podemos atribuir ciertas propiedades autorregenerantes gracias a una reacción de reticulación química. Para que esta reacción se produzca basta con aplicar calor.
Al aplicar calor, el plástico dañado restaura su estructura molecular inicial. Basta con aplicar unas temperaturas relativamente bajas, entre 50 y 120 grados Celsius.
Pese a no ser el primer material con estas propiedades autorregenerantes, este estudio supone grandes avances, ya que el proceso de restauración no requiere unas condiciones externas complejas para la reacción y se lleva a cabo en muy poco tiempo.